El sector digital se encuentra en una constante evolución. Nuevas mejoras tecnológicas ayudan a la evolución de comercios y personas; pero también se convive con diversos peligros. Los ataques de los ciberdelincuentes son frecuentes. Empresas y usuarios trabajan en el ámbito de la ciberseguridad, protegiendo los datos personales o bancarios cuando se accede a cualquier portal o negocio online.
Cualquier acción de trabajo o de ocio gira entorno al mundo digital. Los delincuentes también han transformado sus hábitos y cualquier ciudadano puede ser víctima de una estafa. Bien sea a través de su ordenador o de su teléfono móvil. Por este motivo, aquellas empresas, cuyo negocio está enfocado al comercio electrónico, invierten sumas de dinero y de esfuerzo en sus equipos de seguridad para trasmitir confianza a sus clientes.
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Pasarela de pago: en cualquier negocio online
Los métodos de pago, entre otras medidas, cuentan con el mayor de los focos en materia de seguridad. La razón que explica esto se encuentra en el valor de los datos que se mueven en cualquier transacción económica. Los datos bancarios son muy delicados; los datos personales, también. Asimismo, según diversos estudios, los usuarios puntúan como un elemento clave que un negocio digital refuerce la seguridad a la hora de realizar una compra.
Que un negocio cuente con una correcta pasarela de pago es una tarea tan sencilla como cómoda. Y segura. Los pagos son cifrados y cuentan con el aval tecnológico de las entidades bancarias. Los bancos, como sabrá cualquier usuario, también informan puntualmente al usuario de cualquier movimiento bancario al tiempo que proporciona información para completar esa compra online.
Usuario: consejos básicos de ciberseguridad
¿Y cómo un usuario detecta que ese negocio online es seguro? Hay varias recomendaciones a seguir. Por ejemplo, que a la hora de pagar siempre exista esa pasarela de pago con un banco; que comprobemos que hay un certificado de seguridad instalado (SSL, la famosa ‘s’ en el http), cuya misión es cifrar todos los datos (personales y bancarios) ante cualquier hacker. Que un negocio muestre todos los acuerdos legales y bancarios es otro plus. Un buen sistema de atención al cliente capaz de resolver cualquier incidencia es otra medida de seguridad y confianza.
Asimismo, aquellos clientes que deseen profundizar en estas comprobaciones deben saber que cuentan con sitios que se dedican a verificar su seguridad como el siguiente comparador de casas de apuestas que aceptan skrill. Como el tiempo es oro, también hay otros consejos fundamentales que son sencillos de adquirir.
Nunca se deben compartir datos importantes con terceros si no tenemos la seguridad de quién es el interlocutor. Debemos desconfiar de aquellas empresas que ofrecen grandes ofertas o carecen de los accesos y datos comunes que comentábamos anteriormente. No conectarse desde redes públicas, salvo que usemos una VPN. Establecer unas contraseñas fuertes (no sólo numéricas o con nuestro nombre) y cambiarlas cada cierto tiempo.
El sentido común es, en definitiva, el mejor aval con el que contamos a la hora de realizar cualquier tipo de transacción económica, así como realizar esas compras en empresas comúnmente conocidas y que velan arduamente por la seguridad de los datos de sus clientes. Hay que recordar que todas las compañías deben cumplir con una normativa nacional y europea a la hora de poner a buen recaudo todos los datos.
