La UE ve alarmante la proliferación de casos en todo el continente con la llegada del otoño
Envía un último aviso para frenar los contagios de la Covidien-19 si se quiere evitar “una repetición de la primavera”
“Estamos muy preocupados.” En la Unión Europea hay una gran inquietud por el incesante ritmo de los contagios de España con Madrid liderando los rebrotes. El Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades (ECDC) lo incluyó ayer entre los siete estados de la UE más críticos por el nivel de infecciones de la Covid-19, junto con Hungría, Bulgaria, Rumania, Chequia, Croacia y Malta.
Bruselas no es capaz, sin embargo, de decir que hacen mal las autoridades españolas y las comunidades autónomas para frenar la expansión del virus. “En principio, están implementando las medidas”, admitía ayer la directora del ECDC, Andrea Ammon, en su primera rueda de prensa desde que comenzó la pandemia. “Buena parte de la transmisión es por reuniones privadas como fiestas, comidas familiares o bodas”, indicaba Ammon, sin querer culpar del Estado y recordando que esto también ocurre en otros países europeos. Aparentemente ignorando el porqué de la particularidad del caso español, la UE receta la misma medicina a todos: test, rastreo y centros de salud bien armados.
Con la llegada del otoño, Europa se tiñe de naranja y rojo. Son los colores de las zonas más perjudicadas por los rebrotes, que dominan el mapa de riesgo del ECDC. Hace sólo un mes, España y Rumanía eran los únicos en rojo. Ahora también lo están Bélgica, Chequia y gran parte de Francia, mientras que Portugal y los países balcánicos están en naranja. Por el contrario, Italia, Alemania, Polonia, los nórdicos y los bálticos resisten el embate en la segunda ola de la pandemia.
La UE ve alarmante esta proliferación de casos de las últimas semanas. “Las medidas de control tomadas no han sido suficientemente eficientes, o no se han hecho cumplir o no se han seguido como era”, lamentó ayer la eurocomisaria de Salud Stella Kyriakides. Según ella, la situación vuelve a ser “muy preocupante” porque algunos estados ya registran un pico “peor que en marzo”.
Por ello, Bruselas envió ayer un último aviso a las capitales para evitar lo peor, los confinamientos. “Puede ser la última oportunidad de prevenir una repetición de la última primavera”, aseguraba Kyriakides. La Comisión Europea exige a los gobiernos que tomen medidas “inmediatas” ante cualquier señal de rebotes de Covid-19 si no quieren volver a paralizar por completo la economía y la vida social. Las instituciones europeas recomiendan aumentar la capacidad para hacer PCR y rastreo de casos, mejorar los recursos de la sanidad pública y garantizar equipos de protección. También ven vital aplicar cuarentenas o respuestas localizadas para reducir la transmisión del virus.
Si no se hace esto, los centros sanitarios se exponen a una dura temporada de la gripe con la Covid-19 circulando libremente. Bruselas reitera que se debe avanzar y ampliar la campaña de vacunación y preparar un plan para los “peores escenarios”: “No se puede bajar la guardia”, defendió Kyriakides. A pesar de sus esfuerzos para poner sentido común en la respuesta europea a la pandemia, la chipriota admitía ayer la frustración que siente por no tener competencias en salud. “Nos hacen caso hasta cierto punto”, decía, respondiendo a la pregunta de si los estados siguen sus recomendaciones.