Suerte muy dispar para los equipos asturianos en LaLiga Smartbank. El Sporting, que había levantado a su afición tras la goleada ante el Almería (4-2), volvió a ver cómo La Mareona se levantaba, pero esta vez para abuchear a sus jugadores. Y es que la actuación rojiblanca contra el Alcorcón dejó mucho que desear (1-3). El Oviedo, por su parte, dio la vuelta a su partido ante el Albacete (1-2).
Quién diría a los de José Alberto que, pocos días después de fulminar a un coco como el Almería, serían pitados por el Molinón. Su comparecencia ante el cuadro alfarero fue inexistente; menos de 40 minutos necesitó el Alcorcón para hacerse con tres goles de ventaja.
Poco más en la segunda parte, donde ni el corazón del Sporting pudo adelantar líneas. El Alcorcón dejó que pasase el partido, por más que Djurdjevic hiciese el gol del honor en el último minuto.
El Oviedo sonríe lejos del Tartiere
Muy distinta sería la actuación del Oviedo en el Carlos Belmonte. Salió timorato ante un Albacete que empieza a verse cómodo en la clasificación. Y eso le costó caro, pues el Queso Mecánico se adelantó por medio de Dani Ojeda a la media hora de partido.
Pero el Oviedo encontró justicia tras la reanudación, aunque le costaría lo suyo. No sería hasta el último cuarto de hora cuando, primero Sangalli y luego Borja Sánchez, dieron la vuelta a un partido que ya sitúa a los carbayones fuera del descenso.