El presidente Pedro Sánchez concedió en la noche de ayer una entrevista a TVE, donde abordó los diferentes retos a los que se enfrenta el Gobierno de coalición progresista en sus primeros días.
“Estamos llamados a protagonizar la legislatura del diálogo. Tenemos que abrir un diálogo territorial. Quiero abordarlo con energía”, aseguró el presidente.
“Vamos a proponer una reunión con Quim Torra en la primera semana del mes de febrero“. “Seré yo quien vaya a las Comunidades autónomas para hablar de los problemas reales de la ciudadanía”, añadió, pues la intención de Sánchez es “ir al encuentro de todos los presidentes autonómicos que tienen problemas que tienen que ser resueltos con el Gobierno”.
Respecto a su reunión con Quim Torra, producto de las negociaciones con ERC para alcanzar la mayoría de votos en la investidura, el líder de los socialistas asegura que, ahora, “la situación de Cataluña está más tranquila”.
“Ellos defienden la autodeterminación, nosotros defendemos el autogobierno”, quiso añadir.
“Hay que devolver a la política una crisis y un conflicto que es político. No nos podemos escudar detrás del Tribunal Supremo. Lo que no puede ser es que nos encontremos una crisis heredada y que no encontremos ayuda de la oposición”, zanjó el presidente Sánchez.
Sobre el nombramiento de la anterior ministra de Justicia, Dolores Delgado, como nueva fiscal general del Estado, el socialista se muestra tranquilo. “Su currículum (el de Dolores Delgado) es impecable y goza de la confianza del Gobierno. Le he pedido que actúe con independencia y que aplique el cumplimiento de la legalidad”.
Sánchez considera que la polémica llega por ese frente como podría llegar por cualquier otro. Por ello, pide que “la oposición no critique sobre supuestos, sino sobre hechos”.
Pin parental
En otro orden de cosas, Sánchez ha querido dejar claro su rechazo absoluto al veto parental propuesto por Vox y secundado por el PP. “Hoy el PP en Madrid ha dicho que hay cero denuncias y una queja por escrito. Estamos hablando de un problema inventado por la ultraderecha“, dijo.
Y es que, para el presidente, “no existe este problema”, por lo que espera poder “hablar de los problemas reales de la ciudadanía, no inventarnos problemas como es esto”.