Difícil saber cuánto tardarán en ponerse de acuerdo PSOE y ERC en sus negociaciones por la investidura de Pedro Sánchez. Lo que parece claro es que la cosa no se alargará mucho más del día de Reyes. Aunque cabe una mínima posibilidad de que los republicanos den su brazo a torcer antes de que termine el año.
En cualquier caso, todo dependerá del escrito que presentará la Abogacía del Estado en torno a la sentencia del Tribunal Judicial de la Unión Europea, que ha tenido a bien constatar la inmunidad de Oriol Junqueras, condenado a 13 años de prisión por sedición, en calidad de eurodiputado.
No sería más que un gesto simbólico, pues todo dependerá del criterio del Tribunal Supremo. Aun así, ERC entiende que, en función de cómo se redacte dicho texto, se sabrá si el Ejecutivo está dispuesto a dejar atrás la “vía represiva” y buscar una solución política al conflicto catalán.
Los republicanos valoran positivamente las declaraciones de la vicepresidenta Carmen Calvo, que apuesta por que la Abogacía del Estado “ayude” al Supremo a cumplir la sentencia de Luxemburgo. De todos modos, en el partido catalán asumen que la mejor garantía será dejarlo negro sobre blanco en el dictamen de los servicios jurídicos del Estado.
ERC deja atrás la unilateralidad
La apuesta de ERC es clara. Deja atrás la unilateralidad y apuesta por el diálogo y la negociación. Y, aunque la sentencia del TJUE llevó a los republicanos a anunciar la congelación de las negociaciones con el PSOE, nada se ha detenido, pues los interlocutores de ambos partidos no han dejado la conversación. Ya lo dijo Junqueras: “No se ha de parar la negociación en ningún caso”.
En todo caso, el acuerdo parece cuestión de días. Tal vez, cuestión de horas, aunque en La Moncloa tratan de simultanear dicha negociación con la que mantienen abierta con Unidas Podemos para consolidar la estructura del Gobierno.