Gran jornada para los equipos asturianos en LaLiga Smartbank. El Oviedo consiguió su primera victoria del curso en el Heliodoro Rodríguez López, donde supo sufrir para hacer valer el solitario gol de Bárcenas (0-1).
Por el contrario, el Sporting se dio un homenaje frente a uno de los cocos de la división de plata. El Almería salió escaldado del Molinón, que fue testigo de la explosión goleadora de los chicos de José Alberto (4-2).
Sabía Javi Rozada que su equipo necesitaba sumar su primera victoria cuanto antes. No por una cuestión de números –el equipo sigue en descenso–, sino por encontrar sensaciones que hagan creer a los jugadores que pueden salir del atolladero.
Lo hizo el Oviedo sin desplegar un juego bonito, pero sí muy eficaz. Las variantes introducidas por el entrenador mostraron a un equipo de presión más moderada, compacto en todas sus líneas para conseguir el primer objetivo de todo equipo en problemas: dejar la portería a cero.
No fue sin esfuerzo. El Tenerife encontró la espalda de la zaga en varias ocasiones, pero las ayudas defensivas negaron el premio al equipo isleño. Aunque los locales tenían la pelota, fue el Oviedo el primero –y el único– en golpear. Omar Ramos tiró un pase espléndido por detrás de la defensa, donde apareció Bárcenas para batir por bajo a Ortolá.
El Sporting se ceba con el Almería
El Almería llegaba rebosante de confianza al Molinón, con el Cádiz a tiro de piedra en los más alto de la tabla. Pero al Sporting le llegó por fin su primavera, y en forma de goles. Los de José Alberto, que el gol los había esquivado en lo que va de temporada, se rasgaron las vestiduras ante un Almería que pudo haber hecho más.
Los goles de Valiente, Babín y Aitor García –por partida doble– hicieron inútiles los esfuerzos de Petrovic y Maras. Los almerienses solo pudieron maquillar un resultado que fue climático para la parroquia rojiblanca.