El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) pone a disposición de la Organización Mundial de la Salud (OMS) su tecnología de test serológicos de covid-19 para que pueda ser fabricado en países de África y otros en vías de desarrollo.
El vicepresidente de Investigación Científica y Técnica del CSIC, Jesús Marco, ha anunciado la decisión en el acto del primer aniversario del C-TAP (Covid-19 Technology Access Pool), presidido por Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, y con la presencia de la ministra de Exteriores, Arancha González Laya.
El C-TAP es una iniciativa de la OMS para facilitar acceso rápido, igualitario y asequible a los productos sanitarios contra la covid-19 mediante el aumento de la producción.
“En el CSIC, hemos trabajado desde el inicio de esta pandemia para que todas las tecnologías relacionadas con covid-19 que se están desarrollando en nuestros laboratorios lleguen a la sociedad lo antes posible”, ha señalado Marco. “Nuestro objetivo es que se fabriquen tanto en España como en cualquier otro país que las demande, y para ello hemos abordado licencias de cesión de derechos de explotación de las tecnologías del CSIC en términos no exclusivos, evitando situaciones en las que la demanda no pueda ser atendida por limitaciones de producción por parte del licenciatario”, ha añadido.
Marco ha señalado que tras conocer la iniciativa C-TAP, el CSIC inició hace unos meses conversaciones tanto con la OMS como con la Medicine Patents Pool (MPP), organización de salud pública respaldada por las Naciones Unidas que trabaja para aumentar el acceso y facilitar el desarrollo de medicamentos para países en vías de desarrollo. El objetivo del CSIC es lanzar proyectos de transferencia para que sus tecnologías se fabriquen de forma que lleguen a todos aquellos países que las demanden y a precios asequibles para la ciudadanía.
La primera tecnología que ofrece el CSIC es un test serológico con una fiabilidad del 99%, capaz de identificar y cuantificar tres tipos diferentes de anticuerpos (IgG, IgM e IgA) y capaz de diferenciar los anticuerpos producidos por la vacunación, de los producidos por la infección natural por covid-19.
Este tipo de test utiliza 4 proteínas del virus y es capaz de identificar y cuantificar 3 tipos de anticuerpos. Estas pruebas serológicas han sido licenciadas en formato de kit ELISA a la empresa española Immunostep, ubicada en Salamanca, en términos no exclusivos. Los test ELISA se comercializan desde otoño de 2020 en Europa y en México. El CSIC ha mantenido conversaciones con una empresa argentina y otra mexicana para evaluar la posibilidad de fabricar estos tests en estos países.
“Se espera que los test serológicos sean el primer proyecto de colaboración entre el CSIC y la OMS, y ambas instituciones tienen la idea de extender esta iniciativa a otras tecnologías relacionadas con la covid-19”, señala Javier Maira, responsable del Área de Estrategia Comercial e Internacionalización del CSIC.
Fuente: Moncloa