Gonzalo Blanco SardinaGonBlanSar
En su visita este domingo a la Región de Murcia, Pablo Casado ha cargado contra el Gobierno por utilizar las críticas hacia el “pin parental” como una “cortina de humo”. Una estratagema que, según el popular, los socialistas y morados utilizan para desviar la atención sobre el nombramiento de Dolores Delgado como nueva fiscal general del Estado.
Junto a alcaldes populares de toda España, Casado ha criticado duramente a la ministra de Educación, Isabel Celáa, quien dijo esta semana que los menores no son propiedad de los padres y que tienen sus propios derechos.
Unas palabras que el líder del PP ha comparado con la idea del régimen cubano o las repúblicas socialistas. Allí donde, ha subrayado, “los niños son de la revolución” y los propios hijos denuncian a sus padres “cuando no son buenos revolucionarios”.
“Esto ya no es una broma, es que lleva tres días ratificándolo”, ha lamentado, y ha insistido en que se trata de una cuestión de “gravedad extrema“.
“Lo peor de todo”, ha dicho, es que son “cortinas de humo”, puesto que el ‘pin parental’ está funcionando sin problemas en la Región de Murcia desde que comenzó el curso en septiembre a través de una orden de la Consejería de Educación.
Medida no noticiable
Y es que, para Pablo Casado, la implantación del veto parental no es un hecho noticiable, pero el Gobierno central le ha dado relevancia para distraer la atención de sus propias medidas. Especialmente el nombramiento de Dolores Delgado, anterior ministra de Justicia, como nueva fiscal general del Estado.
Por su parte, los ochos consejeros de Educación de las comunidades en las que gobierna el PSOE han firmado un manifiesto en contra del veto parental ideado por Vox. “Pretenden quebrar la convivencia escolar y la cultura del diálogo para imponer un autoritarismo ciego y acrítico”, exponen tras conocerse la medida implantada en la Región de Murcia por el Gobierno de PP y Ciudadanos.