El Fondo Monetario Internacional (FMI) advierte de que los problemas de la economía española –paro y deuda pública– continuarán durante un tiempo. Concretamente, el organismo internacional anuncia que, en los próximos cinco años, la tasa de desempleo no bajará del 12%, y la deuda pública supondrá un 90% del PIB.
También rebaja las previsiones de crecimiento hasta el 2,2%, aún por encima de la media europea. Coincide con el Gobierno en que el crecimiento para 2020 quedaría en el 1,8%. No ocurre lo mismo con el pronóstico para este año; el Ejecutivo lo sitúa una décima por debajo: el 2,1%.
En cualquier caso, ambos coinciden en que la desaceleración económica de España será más aguda de lo esperado.
Lo preocupante, según el FMI, es el desarrollo de la economía a largo plazo. El paro no descenderá del 12% hasta 2024, mientras que la deuda pública continuará cerca del 90% del PIB. Se espera, por tanto, que el crecimiento de España descienda hasta el 1,5%. Por ello, el organismo reclama reformas estructurales para relanzar la actividad económica.
Déficits estructurales en la economía española
En los próximos cinco años, España no conseguirá rebajar el déficit estructural. Lo único, en 2019 y 2020, al incluir el Fondo las medidas de ingreso que el Gobierno en funciones incluyó en los Presupuestos de 2019 que, finalmente, no han visto la luz.
Aunque en 2024 España acumulará una década continuada de crecimiento, la deuda pública no descenderá del 90,53% del PIB. La bonanza de los próximos años hará reducir el ratio al crecer más la economía que el endeudamiento, pero será lentamente.